La Plata vibra con el triunfo de Estudiantes sobre Gimnasia en el Jorge Luis Hirschi. Memorias y tensiones se reactivan en cada calle y tribuna, en este clásico platense que divide a la ciudad.
Ustedes conocen la rivalidad, pero la estadística impone respeto: 22 años sin derrota de Estudiantes ante el Lobo en su estadio. Con un invicto en casa que se agiganta y la hinchada albirroja empujando cada juego, la diferencia se siente. Sin adornos.
Una racha que ya dura 22 años en el Jorge Luis Hirschi
El clásico platense volvió a teñirse de rojo y blanco, con Estudiantes sosteniendo su invicto como local ante Gimnasia. En su casa del estadio Jorge Luis Hirschi, el Pincha estiró una racha de 22 años sin caer frente a su rival, una continuidad que alimenta confianza y pertenencia.
¿Cuál es el secreto? Orden defensivo, eficacia en las áreas y un ambiente que pesa. Ese patrón explica el dominio del Pincha en los cruces recientes y la sensación de superioridad en La Plata que se repite cada vez que el clásico se juega allí, con tribunas colmadas.
