River Plate de Marcelo Gallardo no encuentra respuestas, ocho derrotas en diez partidos y rendimientos irregulares. Entre ajustes sin efecto, la racha de derrotas aumenta la presión sobre Gallardo cada fecha.
Las caídas ante rivales fuertes y modestos revelan problemas claros, desde poca profundidad ofensiva hasta desajustes defensivos que se repiten. Para ustedes, el diagnóstico es evidente: una crisis deportiva prolongada y una identidad perdida que desfigura al equipo en instancias decisivas. Sin excusas.
Un equipo sin ideas y bajo presión tras una racha negativa inédita
River Plate, dirigido por Marcelo Gallardo, atraviesa una serie de 10 partidos con 8 derrotas que golpea su proyecto. Más allá de los resultados, se percibe una falta de intensidad en la presión y en las segundas jugadas, lo que vuelve previsible al equipo.
La racha aumenta la presión de la hinchada y del club por respuestas inmediatas. Se repetían errores tácticos en las transiciones y, tras la derrota contra Gimnasia, el margen de maniobra se reduce para el entrenador, que busca ajustes puntuales. ¿Habrá cambios de sistema o nombres en el próximo compromiso?