Una ciudad entera vibró con el triunfo en San Nicolás, tras un empate sin goles y una definición desde los doce pasos que exigió nervios de acero.
Ustedes lo vieron, el cambio de arquero fue la jugada que empujó al Club Ciudad de Bolívar hacia el ascenso a primera, con fe y precisión bajo presión. La consagración llegó en una final áspera, típica de la tercera categoría. Desde el Torneo Federal A, el boleto marca destino: debut en la Liga Profesional Argentina para una institución joven que supo resistir y acertar.
Penales, un cambio de arquero audaz y una noche histórica para el Club Ciudad de Bolívar
Para quienes siguieron el partido, fue una noche tensa que terminó con el ascenso de Ciudad de Bolívar a la Liga Profesional. El duelo se disputó con nervios y concentración; en el Estadio Único de San Nicolás se marcó el escenario de una gesta difícil que quedará en la memoria.
El cuerpo técnico tomó una decisión arriesgada en los minutos finales. Ese movimiento, un cambio de arquero calculado para la definición por penales, fortaleció al equipo y encendió la fe de la gente; ustedes lo vieron: serenidad, acierto y festejo, con Bolívar sellando su lugar entre los grandes.
